Banda internacional de cuatreros causa estragos en paraje itateño
En tan solo tres días hicieron varias incursiones y se llevaron 25 novillos hacia el vecino país. Las pérdidas superan los ocho millones de pesos. Se acumulan las denuncias y no hay detenidos por estos hechos. Amenazan con tomar la justicia por mano propia.
Una banda criminal de cuatreros compuesta por paraguayos y correntinos viene provocando estragos entre los productores pecuarios de un paraje rural próximo a la localidad de Itatí. En menos de una semana, robaron 25 cabezas de ganado en distintas chacras de la zona. Los animales son llevados hasta la costa del Paraná y faenados en el lugar, o cruzados en embarcaciones hasta el vecino país. Los damnificados exigen a las autoridades policiales provinciales y a las fuerzas federales que actúen efectivamente, ya que el daño es enorme y las pérdidas en materia económica son millonarias.
Los ataques no son nuevos y, según indicaron a diario época, algunos de los damnificados, antes eran uno o dos animales por mes, pero entre el 31 de enero y los primeros días de febrero, los cuatreros hicieron varias incursiones y se llevaron "en cuota", primero 15 novillos y posteriormente otros 10 animales vacunos.
Quienes padecen estos embates de cuatreros internacionales son los productores del paraje Guayú, ubicado a unos siete kilómetros de la localidad de Itatí. "Quienes nos roban los animales son bandidos de la misma zona donde vivimos, les entregan la carne faenada o los animales en pie a delincuentes que se cruzan en barcazas desde Paraguay y se llevan el ganado impunemente. Nuestro trabajo, esfuerzo e inversión de años, se van por el río y nadie los detiene. Ni siquiera pasan a patrullar. El perjuicio causado en los últimos robos asciende a poco más de $8.250.000", sostuvo una productora damnificadas. Su hermano y su padre, también dedicados a la cría de ganado, fueron otras de las víctimas de los cuatreros. Pero en la zona son varios los productores a los que les vienen robando periódicamente animales. Ante tanta impunidad, todos prefieren resguardar su identidad y hasta suena preocupantemente lógico.
En paraje Guayú, pareciera que todos saben quiénes son los cuatreros y hasta aportan nombres. La misma información que maneja la Policía en cada denuncia que formulan los damnificados y a las que tuvo acceso diario época. "Llamamos a la Policía y no vienen o llegan tardísimo. Llamamos a la Prefectura Naval y llegan casi una hora más tarde. Solo respondió Gendarmería, que llegó desde Paso de la Patria y al menos se tomaron la molestia de incursionar entre los matorrales para determinar por dónde sacan los animales, pero cuando estos se van, los cuatreros vuelven a atacar de madrugada", indicaron otros de los damnificados.
Pero las alertas se encendieron en las autoridades luego de que comenzaran a correr una serie de audios en los que algunos sostienen en "defender a balazos" su producción, presagiando un panorama sangriento en la zona, de no mediar una intervención inmediata de la Justicia y las fuerzas de seguridad.
Por ahora, los productores pecuarios del paraje Guayú sienten que sus reclamos y hasta incluso sus denuncias "caen en saco roto y no son tenidas en cuenta", ya que el delito no cesa; es más, tiende a agravarse.
Durante el año 2023, la provincia tuvo una fuerte apuesta a la lucha contra el cuatrerismo y el abigeato, aunque pareciera ser una pelea difícil de ganar, ya que es por ahora uno de los delitos a los que más se combatió, pero que a la vez más creció. El planteo de los productores no solo es más presencia y patrullaje, sino más efectividad inclusive en la Justicia a la hora de contener y condenar a quienes son detenidos por este tipo de delitos. En paraje Guayú han pensado incluso en patrullas propias y vigilias en las zonas donde operan los cuatreros, con todo el riesgo que eso implica para civiles que no están acostumbrados a una posible confrontación armada, pero que están hartos de los robos y aseguran que defenderán a cualquier precio su producción.