26/03/2025

La oposición avanza con su estrategia para rechazar la designación de García-Mansilla en la Corte

Siete kirchneristas firmaron un dictamen a favor, aunque en disidencia total. En tanto, Martín Lousteau dijo que se pronunciaba en contra con otro despacho, pero apareció más tarde a favor junto a Guadalupe Tagliaferri (Pro). La jugada conjunta busca que la discusión llegue al recinto.



Una unión opositora de la comisión de Acuerdos del Senado, conformada entre kirchneristas y el presidente de la UCR, Martín Lousteau, entre otros, emitió dos dictámenes a favor sobre el pliego que propone a Manuel García-Mansilla como juez de la Corte Suprema. El académico fue designado “en comisión” por el Ejecutivo y días atrás juró en el máximo tribunal de justicia del país, lo que eleva la tensión política por un tema de relevancia institucional.

El objetivo de lo ocurrido este jueves en la comisión, que comanda la legisladora Guadalupe Tagliaferri (Ciudad de Buenos Aires-Pro), fue igualar en condiciones a García-Mansilla con el magistrado federal Ariel Lijo -no juró en la Corte aún, pero ya cuenta con un despacho a favor-, en cuanto a que ambos tengan dictámenes listos para ir al recinto de la Cámara alta y no precisar, en el caso del académico, una habilitación con dos tercios.

Al momento de la definición, aparecieron dos dictámenes. El primero fue sorpresivo y a favor -aunque en disidencia total- de los siete integrantes del kirchnerismo en la comisión; el segundo, el propio Lousteau dijo que era en contra -en plena reunión-, aunque luego apareció como a favor, también rubricado por Tagliaferri. En total, nueve senadores -la mitad más uno de Acuerdos- se expresaron, lo necesario para conformar una orden del día al igual que la de Lijo.

¿Cuál es el siguiente paso? Que al menos cinco senadores presenten un pedido de sesión a la titular del Cuerpo, Victoria Villarruel. El Frente de Todos quiere que sea el próximo jueves, siempre que lo avale la vicepresidenta, quien es la única con potestad para este caso, salvo que se empuje una reunión de Labor Parlamentaria entre jefes de bloque.

Además, desde la bancada explicaron a Infobae que el paso lógico en la comisión de Acuerdos era firmar un dictamen a favor y no quedar en la posición incómoda de tratar “el rechazo del rechazo” en el recinto, para evitar confusiones. Además, se convirtió en el de mayoría y quedará claro que, con 25 votos en contra, ambos candidatos quedarían rechazados. Con el viraje de Lousteau, quedó demostrado que la estrategia del kirchnerismo era la más adecuada.

Más allá del despacho a favor del kirchnerismo, lo cierto es que lo ejecutado por los nueve senadores tiene, como finalidad, rechazar ambos pliegos. Consideran -hoy lo dijeron de manera pública- que el Ejecutivo excedió los límites, al aprovechar la ventana entre el final de las sesiones extraordinarias -21 de febrero último- y el inicio del período ordinario -1 de marzo- para activar a Lijo y García-Mansilla “en comisión”. Y que la Casa Rosada sobrepasó en lo institucional a la Cámara alta, que estaba trabada con la discusión de los candidatos. Ambos cuentan con estabilidad hasta el final de la próxima Legislatura.

El convite de este jueves también se convirtió en un ring discursivo entre Lousteau y el bonaerense más relevante que tiene la UCR, Maximiliano Abad. En medio de la comisión, el porteño acusó a sus compañeros de Acuerdos por no dar quorum e intentar frenar la firma de los ahora dictámenes. “Que el presidente de mi partido, al que lo reconozco como presidente y tengo respeto intelectual, acuse innecesariamente a senadores de su partido, es una bajeza fuera de lo común en la política”, respondió el segundo.

Antes del análisis de la situación de García-Mansilla, los nueve legisladores que asistieron a la comisión reeligieron a Tagliaferri como presidenta de Acuerdos y a la kirchnerista Anabel Fernández Sagasti (Mendoza), como vice. Vale recordar que la porteña salvó, el año pasado, el embrollo de los embajadores políticos designados por el Gobierno y dirigió sin ninguna fisura todo el trámite de los dos pliegos de la Corte Suprema.

Objeciones

Uno de los primeros en hablar fue el jefe del Frente de Todos, José Mayans (Formosa). “Con este ejemplo, el próximo que venga de presidente podrá nombrar en comisión y cambiar al segundo, tercer y cuarto año. Si nombran miembros de la Corte así, también lo podrán hacer en tribunales inferiores y esta comisión no tendría sentido. Mismo con fiscales y defensores. Es grave y la primera vez que pasa”, señaló.

Por su parte, Lousteau advirtió que García-Mansilla aseguró, durante la audiencia pública de agosto pasado, que no estaba dispuesto a asumir por decreto. En ese sentido, manifestó: “O el juez nos mintió y no tiene interés por sostener la verdad, o tengo que pensar que es un juez de la Corte que nos dijo la verdad, pero después no lo pudo sostener”. Seguido a ello, recordó -de forma muy crítica- que Mauricio Macri también había intentado activar a dos cortesanos por decreto. Lo llamativo de esto es que, cuando ello ocurrió, el radical era embajador de la gestión Cambiemos en los Estados Unidos.

Sobre el final, Tagliaferri sentenció: “Como senadora, juré por la Constitución y tengo las mismas convicciones de siempre. Cuando está mal, está mal. No cambio de acuerdo a quién gobierne, y eso perjudicó a la dirigencia política. Tener opiniones distintas sobre la Constitución me parece grave. El que quiera encontrar otra explicación, que haga novela. No me vengan a correr sobre dónde estoy parada, resisto todos los archivos y estoy en el mismo lugar”. La única legisladora -no de la comisión- que exigió la palabra para defender a García-Mansilla fue la macrista Carmen Álvarez Rivero (Córdoba).

Por Mariano Casal